¿Cómo debes cuidar tus joyas?

Hoy te cuento algunos trucos para cuidar y dar amor a tus joyas preferidas de plata de ley.

¡Estás contenta por haberte regalado esa joya de plata de ley que tanta ilusión te hacía desde hacía mucho tiempo!

Llega a casa tu pedido, empaquetado con delicadeza. Deshaces su lazo de yute, abres la cajita y ahí tienes tu joyita deseada. Es tan amorosa que te la pones en ese mismo instante y no te la quieres quitar ni un solo instante. Y es que para eso están, para usarse, ¿verdad?

Después de unos usos, observas que se ha ennegrecido un poco. Te entran ganas de devolverla o de pedir explicaciones al respecto pero, ¡no te agobies! No te hemos dado gato por liebre. De hecho, tienes en tus manos una joya de calidad, de plata de primera ley pero la plata tiende a oscurecerse con el uso. Esto se debe a muchos factores como nuestro propio sudor.

En nuestra vida cotidiana, estamos expuestos a sustancias (a veces sin saberlo) que pueden alterar el brillo o el tono de nuestras joyas. Por eso mismo, hay que tener en cuenta un par de detalles para que se mantengan perfectas por más tiempo. Te dejo aquí algunos truquitos en versión resumida para cuidar de tus joyas de plata:

✅ Pasa alguna gamuza o paño de algodón para darles un poco de brillo. ¡Saca todo su esplendor!

✅ Si por lo que sea, estás algún tiempo sin usarlas puedes guardar las joyitas individualmente en una bolsita hermética o de tela y luego colócalas en tu joyero. También puedes dejarlas individualmente en cajitas.

✅ Si se te hacen nudos cada dos por tres, no te preocupes. Intenta cerrar las cadenas o pulseras y déjalas en plano. Y adiós a los nudos rebeldes.

✅ Intenta evitar dejar tus joyas en lugares húmedos como un baño o al sol cuando vas a la playa.

✅ Evita el contacto con productos químicos como cremas, alcohol, perfumes, detergentes, etc. Evita también las sustancias corrosivas como por ejemplo, spas, jacuzzis o piscinas. La lejía o los productos de peluquería también pueden alterar su aspecto así que para todos esos momentos, mejor evitar llevarlas puestas y así no hay sustos. Si te pasa y no te has dado cuenta, intenta limpiar rápidamente cualquier resto de tu joya con agua y jabón y luego, sécala muy bien.

Y eso es todo. Espero que te resulten útiles estos consejos y que si aún así tienes dudas o podemos ayudarte en algo no dudes en escribirnos a info@perladegato.com ya que que estaré encantada de poder ayudarte. Que tengas muy buen día y que disfrutes de tus joyas.

Un saludo,

Carmen